Maldita vida es ésta,
que juega a ponerse el vestido
de quien la quiera vestir,
y osa reírse en el llanto,
de quien la quiere desvestir.

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…y vuestra sombra, esta noche... ¿que os dice?






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...creo que el tiempo es alguien de cara enjuta y pasos hábiles...

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Deja que el cielo alcance tus manos...





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En el Silencio...

el verdadero encuentro con las palabras.




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...Seremos menos "individuos" en cada paso que compartamos...

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Imagen: el reflejo en una especie de espejo de alguien que no necesariamente soy yo.


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...Tantas personas y tan pocos humanos...

De tanta autocompasión...

...terminaremos negándonos 3 veces a nosotros mismos...

En la adoración de Sol

bastaría con besar la flor más cercana de nuestro paisaje terrenal...

y para la Luna...
lograr con los ojos, escuchar el aroma que deja su presencia en nuestro caminar.





- El principio de la divinidad -

¿El"ser" como la conjugación del existir y el estar?

De existir... Dios sería el principal Poeta Maldito...

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El ser se renueva incesantemente en cada despedida que nos hacemos a nosotros mismos mientras viajamos hacia el cuerpo inutil de los miedos. El ser se justifica en el estar, si no, sólo seriamos un instrumento para el sí mismo que es parte de la invension contidiana y deformada de lo que pactamos con el resto.



...

Música que iguala a la lágrima...

...en el fallecimiento de las manos sobre las teclas... una nota es un punto suspensivo...

¿A qué le tienes miedo?

Escuchar el cigarro consumirse, el baile de las llamas ante la provocación de la madera, la poesía del contacto de las manos con el cuerpo, o lo que nuestra propia respiración enuncia...
Puede ser el primer paso para escuchar el verdadero ritmo de nuestra alma contemplativa y serena...

(… algo así como nuestra propia canción.)

Desde el silencio encontrar los sonidos...
y tararear con los ojos lo que de ellos aprendimos...

¿Cuantos insectos venenosos han de seguir naciendo de las mentes inconscientes, dueñas de gran parte del mundo???

Para los buscadores de verdades...

propongo buscar en el basurero más cercano...

Se ofrecen palabras sin demanda…

Guardadas en el fondo del sótano colectivo…

Aniquiladas mientras buscaban su propia razón de ser...

Renacidas en el olvido y reconfiguradas en el sentimiento oculto…

Fantaseadas, imaginadas y vividas…

Se ofrecen para aprender a callarlas… y decirlas con la mirada…

Tantas doctrinas tan humanitarias...!!!

...y aún no conseguimos aceptar al "otro" que no lleva nuestros ojos...

Para no morir en el pensamiento...

Propongo limpiar las cenizas acumuladas...
en aquellos ceniceros enfriados,
dejar de mirar los agujeros...
en las frases nunca dichas...
y comenzar a plantar con la risa...
la magia de una mirada querida...
delicadamente diseñada.

Discursos Politicamente Correctos...
Discursos Prefabricados...
Discursos Politicamente Incorrectos...
Discursos Artificialmente Decorados...
Discursos Robados...
Discursos Reconfigurados...
Discursos sin Contenido...
Discursos Dulcemente Amargados.

Cerrar los ojos y caminar...
encontrar nuevos paisajes
y los silencios que nos hablan de las estrellas y del alma...

Caminar con los ojos cerrados...
y saber a donde vas...

No sólo hay en la distancia algo más que mil conceptos...
sino que existe en las palabras mucho menos que lo cierto.

El tema de la identidad nos rodea y nos invade, nos presiona, nos afirma, nos modela y nos engaña. Su significado no responde a la pregunta del "¿quien soy yo?", sino que se elabora a partir de la reflexión de "¿quien soy yo frente a ti?" "¿quien soy yo contigo?" “¿quien soy yo sin ti?” “¿que soy yo, que no seas tu?" “¿que soy yo para ti?”"¿que soy yo en este grupo?" "¿que es el grupo en mi?" "¿quien está allá?" "¿Quien está acá?"...

En fin... de preguntas nos humanizamos... y ciertamente se entiende que….

…. sin ti... yo nunca seré.

En la representacion de lo que llamamos vida
nos encontramos con un infinito horizonte, un riel solitario que apenas aprendio a soñar, y un conjunto de piedras que sólo logran recordarnos cuanto duele caer...
De los silencios que tengo,
veo una hoja nacer.